Sus huellas en la tierra

Poema de Luisa Ruiz

Para seguir recordando

las huellas de Luis Colica

solo hay que mirar la viña

y lo imaginarás trabajando.

El Señor lo habrá premiado

por lo feliz que ha vivido,

por las dichas que ha tenido,

su sonrisa y su trabajo.

 

Con 100 años ya cumplidos

quiere seguir madrugando

para seguir disfrutando

de una charla con amigos.

 

El hombre vuelve a ser niño

con el paso de los años,

y disfruta como antaño

cuando vuelve al mismo sitio.

 

¡Cuántas cosas se ha perdido

por mantener el legado

de esos campos que ha regado

con el sudor que ha vertido!

 

Se está haciendo viejo hablando

del campo que fue su vida,

y de lo que habla de día

se duerme luego soñando.

 

Hoy, con los pies ya muy cansados

de caminar más de un siglo,

con la cabeza en su sitio

su misión, aún no ha acabado.