Andalucía y el PSOE
Tras todas las décadas de Gobierno del PSOE en Andalucía, se llega a confundir intencionadamente y de manera muy evidente el lastre que supusieron.
Para quienes participamos en una política más humilde y sincera, ofende ver cómo el PSOE ha tratado de vender como una revolución las bien planificadas sucesiones de sus líderes andaluces : Chaves, Griñán, Díaz, Espadas, y ahora va a ser María Jesús Montero... Con ese proceso, lo único que ha quedado en evidencia ha sido el nudo de intereses que ha construido el partido en todo ese tiempo y que ha tenido como resultado la corrupción. Una vez en el poder, asumieron un discurso agresivo y dramático, como si hubieran estado toda la vida preparándoselo, una vida que dedicaron a la política de representación y no a otra cosa. Según se nos quiso hacer creer desde un primer momento a todos los españoles, con el PSOE Andalucía estaría siempre a salvo : una posición que en estos momentos, y si Andalucía fuese socialista, sería el nido de corrupción más grande del planeta. Griñán se fue al “cementerio de elefantes”, o mejor dicho, al “seguro y protegido cementerio de los elefantes”. Se fue como un cobarde, ya que no fue capaz de retirarse hasta sus últimas consecuencias. Al partido más votado de la historia de Andalucía, el PSOE, ya no se le espera, porque dejó claro en su día que no tiene proyecto, como también demostró que carece de discurso. El PSOE andaluz es tan incapaz que no puede ni darse un lavado de cara a sí mismo, y está esperando a que se lo den desde Madrid para, cuando allí les elijan candidato, poder pedir de verdad elecciones. Mientras tanto, esperan con una “ilusión tremenda” que las noticias de los ERE (porque la causa aún no ha acabado), sean cada vez menos, y con el objetivo de que no salga más mierda a la luz pública. Y luego está la izquierda andaluza más a la izquierda, que fue socia de Gobierno del PSOE algunos años, y que jamás se ha atrevido a tener un discurso crítico que pusiera en entredicho el manoseo de poder que se ha pegado el PSOE.