Un hombre de 66 años ha sido condenado por el Juzgado de Instrucción número 4 de Vélez-Málaga, en funciones de guardia, después de disparar con una escopeta de perdigones a dos hermanastros tras una pelea en un bar de Almayate, según informa el diario Sur.

La resolución se alcanzó mediante un pacto de conformidad, por el que el autor aceptó las penas propuestas. Se le impusieron cuatro meses de cárcel por cada uno de los dos delitos de amenazas contra los hermanastros -uno menor y otro de 29 años- y una multa diaria de 10 euros durante 20 días (200 euros en total) por las heridas leves provocadas al más joven.

Además, el hermano mayor fue sentenciado por un delito leve de lesiones a un acompañante del agresor principal, con una multa de cuatro meses a 10 euros diarios, y otra de 20 días por los daños causados al coche de este.