Francisco Gálvez, director de Noticias 24, avezado periodista y estudioso de la historia de la Axarquía con numerosos libros publicados, nos sorprende con una nueva obra: Los Velámenes del Vieux Port, donde elige una temática social y humana.
Los tiempos modernos han supuesto para el hombre muchas novedades. Una de ellas, la facilidad para viajar. Un viaje, sabemos, es más, mucho más, que ir de un lugar a otro, un desplazamiento, unas vacaciones…
“La palabra escrita me enseñó a escuchar la voz humana”, dice Marguerite Yourcenar en su Memorias de Adriano
Eso de la comida rápida, no lo entiendo. No me extraña que tenga sus seguidores, porque el mundo parece ir a paso de desfile rápido, con un reloj en la mano y contando los segundos que invierte en cada uno de sus movimientos. Vaya a ser que llegue tarde a no se sabe dónde.
Texto: Manuel Rivas
Ilustración: Susana Suniaga
Editorial Alianza
ISBN: 978-84-1148-076-5
15,95 €, (+ 7 años)
Tapa dura, 2022.
Está lloviendo (sigue siendo agua imaginada, a pesar de lo llovido). Pongo un vinilo sobre el tocadiscos y me arrebujo en el sofá, los ojos cerrados.
El pasado 20 de marzo se ha celebrado el Día Internacional de la Felicidad. Oír esta conmemoración en la radio, me provocó una sonrisa; sí, me pareció una nota agradable para empezar el día, pero, a la vez, me asaltaron un montón de dudas.
“Todos los hombres sois iguales”, “Siempre pasa lo mismo”, “Nunca estás contento”, “Jamás haré tal cosa”… Estas y otras frases parecidas las escuchamos con demasiada frecuencia.
Presenciamos, diariamente, en los medios informativos malas noticias: corrupción por intereses económicos; injusticias sociales; guerras fratricidas que se eternizan por un poder egocéntrico, seres humanos que perecen porque quieren cruzar una frontera para alcanzar una vida mejor; toda clase de violencia, y penosamente, la de género que no se vence.
Después de las obras que han remodelado el centro histórico de la ciudad -desde el Camino de Málaga hasta el Parque de Andalucía- se observa una clara ebullición a lo largo de la Plaza de las Carmelitas y calle Canalejas, que nos tiene muy animados y contentos a los del lugar.
Se cumplen ahora veinte años del 11M, aquel horror sangriento que nos despertó una mañana con sonidos e imágenes escalofriantes del atentado terrorista que costó la vida a ciento noventa y dos personas.
La vida nos depara momentos para todo. Hasta en esos instantes que consideramos vacíos y que transcurren en pura monotonía, cuando menos te lo esperas, salta la liebre y ¡zas! te topas con algo que no esperabas.
Recuerdo muy bien cuando era pequeño y, en mi casa y en el colegio, mis padres y mis maestros se afanaban en transmitirnos a los niños de mi época la importancia de no tirar papeles al suelo, de no maltratar las fachadas de los edificios, de respetar el mobiliario urbano, de no hacer, en definitiva, cosas que molestasen a los demás o que socavaran el patrimonio de todos: desde los bancos de los parques hasta los senderos que caminábamos, en una época donde la jungla del asfalto todavía no se había adueñado de nuestras vidas y los barrios de las ciudades tenían el campo más cerca.
Desde la antigüedad, y en muchas partes del mundo, al círculo se le han arrogado interpretaciones simbólicas, espirituales o cosmogónicas.