viernes, 29 de marzo de 2024 13:02h.

Aunque tú no lo sepas

Oigo cantar a Enrique Urquijo un verso hecho canción: Aunque tú no lo sepas me he inventado tu nombre / me drogué con promesas y he dormido en los coches... Es de Luis García Montero, a quien dediqué entre atardeceres mi anterior artículo. Un grandísimo poeta que entretiene últimamente mucho de mi tiempo de lectura. ‘Aunque tú no lo sepas’ es también el título del documental que acabo de ver en Málaga, en el Centro Cultural María Victoria Atencia. Fue por casualidad que me enteré de este acto, y fui sin dudar a ponerle cara al poeta que me hablaba tanto y tan bien desde las páginas de un libro.

Apareció el escritor junto a uno de los jóvenes realizadores del documental, estudioso de su vida y devoto de sus versos. Sencillo, cercano, con semblante amable y vestido con el desenfado del profesor que no puede desprenderse de su capa de poeta, pensé que tenía delante a ese alguien que estaba detrás de los versos que me gustan tanto; alguien que escribe cosas que traspasan fronteras y llegan al alma; que nos conmueve, nos emociona y nos hace sentir la vida como él la siente, como si esos versos estuvieran escritos para nosotros. Lo entendemos, nos entiende, y aunque tú no lo sepas, te descubre sentimientos escondidos, que afloran libres, intensa, violentamente, cuando nos dejamos mecer por la melodiosa cadencia de sus versos. Si alguna vez la vida te maltrata / acuérdate de mí / que no puede cansarse de esperar / aquel que no se cansa de mirarte.

Habló de su vida, de su poesía, de lo que significa para él escribir, y lo hacía con el entusiasmo y la sencillez del profesor que da una clase de literatura a sus alumnos. Hablaba transmitiendo, contagiando, convenciendo. Y después, el documental, un recital de vida, que ganó el Premio Imaginera 2016, lleno de imágenes íntimas, entrañables, con familia, con amigos, con poetas, con escritores, con cantantes, con artistas... Unas secuencias muy bien en­sam­­- ­­bladas que rimaban a la perfección con el alma sensible que se le adivina en todo cuanto escribe. ‘Aunque tú no lo sepas’ es un poema que ha sido contado y cantado por voces conocidas y reconocidas. 

Oímos sus poemas en las voces de sus amigos; vimos cómo el joven poeta de pelo largo se hacía mayor de verso en verso, cambiando su aspecto sin perder ni un ápice del semblante limpio del soñador que sueña todavía. El documental nos abrió de par en par las puertas de su alma, y las ganas de leer más y más de lo que escribe. Hablaron de él sus padres, sus amigos, los músicos, los poetas... Su mujer, Almudena Grandes, contaba cómo se enamoraron; Sabina, entusiasmado, decía que era el mejor poeta, y Serrat cantaba con su voz mediterránea uno de sus versos. Preciosas imágenes del ayer y el hoy de este poeta grande, Premio Nacional de Literatura, que tiene mucha conciencia y ninguna vanidad. 

Acabó el documental y le hicieron preguntas que él contestaba sin prisa, y se prestó a firmar algunos libros. Yo me acerqué con el mío, aún sin estrenar, y le dije que me gustaban sus versos y las puestas de sol. Él sonrió y me dedicó el libro “que habla de buena gente en tiempos difíciles”. Y salí del allí con la sensación de plenitud que me envuelve cuando oigo una sinfonía de Mozart o un aria de Verdi; cuando veo la inmensidad del mar o el baile de la brisa en un campo de amapolas; cuando paseo bajo la lluvia mansa que aviva los colores de la primavera...

Recordando el documental, absolutamente recomendable, siento que el mundo es más ancho, más hermoso y más azul entre versos. Si tú me llamas, amor, yo cojo un taxi / cruzo la desmedida realidad de febrero por verte... ‘Aunque tú no lo sepas’ se emitirá en TVE el día 3 de abril. Volveré a verlo, y sentiré de nuevo que los versos son caricias para el alma. Caricias de terciopelo, que nos empujan a cruzar “la desmedida realidad” de cualquier tiempo para adentrarnos en la magia de un sueño.